hay momentos en la vida que te acuerdas de gente con la que las conversaciones eran amenas y largas, profundas pero suave, agradables pero interesantes, la única pena es que esa gente, la muy cabrita (como es normal) ya no están lo único que puedo hacer es pensar como serian nuestras conversaciones la única diferencia es que yo me respondo lo que yo quiero oír y ellas me reprendían lo que ellas creían que tenia que ser sin importar si me pareciera bien o mal, simplemente que por su parecer tenia que ser así, algunas veces llevaba una alegría y casaban los pensamientos, otras como echarle vinagre a una herida abierta, pero me escuchaban, eran reflexivas, no imponían, respetaban me apoyaban y me acompañaban en el camino que había que recorrer nunca me sentía solo ni perdido, me dejaban que me asomara al precipicio, pero eso si, sin dejarme caer, algunos de los que quedan no es que me asomen al vacío, si no que me empujan mientras hacen un fiesta, lo importante es que en este caso ya me tiro yo.
hay momentos que solo queda la esperanza que el futuro sea menos negro de lo que es el presente, pero también es cierto que somos lo que somos, y no queda mas que ser uno mismo intentado no hacer daño al de al lado, pero que tampoco te.....jodan.
os echo de menos Rosa y Diana, me habéis echo una putada el haberos marchado, pero me alegro de haber tenido el honor de pasear al lado vuestra
Paz, bien y muchas risas
f.p.
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